Hoy hablamos de esas “cosas” provenientes de la naturaleza de los invernaderos y que aprovechan las madres para torturarnos cuidarnos y vitaminarnos… ¡quién no ha soportado la matraca sido bendecido por las dulces palabras maternales… ¡¡Manolito, tómate de una puñetera vez ya el zumo que se le van las vitamiiiinas!!. Cuando además de esas “cosas”, en la mesa se ofrece flan, helado, arroz con leche… decir ¡yo quiero fruta! es seña indiscutible de querer hacerse el guay o de que te falta un tornillo. ¿Quién cojones quiere fruta teniendo arroz con leche?, nadie, vigilarle es un traidor.
Actualmente el rollito filosófico de lo orgánico, de las tres R y de lo políticamente correcto con nuestro planeta está de moda. El último grito en bisutería es utilizar elementos vegetales… ¡Pos mu” bien!, pongámonos a la moda…
Como ser ecológico, al parecer, no está reñido con la filosofía del dinero, estas joyas frutales se comercializan por un precio que va desde los 20 euros hasta más de 80 euros. (No les debe de salir mal el beneficio obtenido por un trozo de fresón engarzado en un cordel). Como mierdaeuristas militantes y practicantes del DIY ya sabéis de que va a tratar el post, de hacer estas joyas orgánicas nosotros mismos ¡que está chupao!.
Como ser ecológico, al parecer, no está reñido con la filosofía del dinero, estas joyas frutales se comercializan por un precio que va desde los 20 euros hasta más de 80 euros. (No les debe de salir mal el beneficio obtenido por un trozo de fresón engarzado en un cordel). Como mierdaeuristas militantes y practicantes del DIY ya sabéis de que va a tratar el post, de hacer estas joyas orgánicas nosotros mismos ¡que está chupao!.
Naranjas normales o sanguinas (que aunque el nombre suene a sanguinario, son inofensivas), kiwis, tomates, caquis, plátanos, fresas, manzanas (fuente de inspiración para un tío vago y listo llamado Isaac), pieles de mandarinas, cáscara de pistachos, semillas de girasol o de calabaza. Toda una variedad defrutos naturales que se transforman en originales joyas tras pasar por el fácil proceso de deshidratación y engarce.
Desventaja de este diseño : el cuidado que hay que tener de no lucirle en la calle en días lluviosos, si no has barnizado suficientemente las lonchas de fruta si se moja, adiós al anillo fruteril.
Ventaja: Si te ves muy mareado de hambre a media mañana te puede servir como “temtempie” (si no le has barnizado)
Ventaja: Si te ves muy mareado de hambre a media mañana te puede servir como “temtempie” (si no le has barnizado)
Sólo necesitas:
* Fruta que se pueda cortar a rodajas pieles o frutos secos,
* Recipiente con agua y sal
* Microondas (otra opción más ecológica, el sol)
* Barniz y brocha fina
* Un “flush” de Imaginación
* Engarces
* Recipiente con agua y sal
* Microondas (otra opción más ecológica, el sol)
* Barniz y brocha fina
* Un “flush” de Imaginación
* Engarces
1 – Corta la fruta a rodajas de entre 0,5 cm y 1 cm o las pieles de las frutas(cítricos, raspada la parte blanca)
2 – Introduce las rodajas de fruta en un cuenco lleno de agua y un puñado de sal. Deja en paz durante unos 10 minutejos.
3 - Con cuidado de no destrozarlas, seca las rodajas con papel de cocina o un paño fino. Coloca las rodajas en un plato llano y tápalas con papel de cocina. Mételo (con papel incluido) en el microondas a 800 kW durante 1 minuto. Si es verano y luce el sol, pon las rodajas de fruta sobre una rejilla y déjalas “tomando el sol” hasta que veas que se han deshidratado por completo (de dos a tres días, según el sol). En el proceso de secado al sol, mételas dentro de casa por la noche para que no cojan humedad.
4- Comprueba que están bien secas y barniza con varias capas de barniz incoloro y dejando secar el tiempo estimado en las instrucciones del bote de barniz entre capa y capa de éste.
5- Engarza creando el diseño que más te guste.
Para saber más, clic aquí.
wow que bonito muchas gracias lo tomare en cuenta ok
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